- Joven, disculpe… ¿Su carta no tiene destinatario?...
- Si, lo se.
- Si, lo se.
Hola,
Cuando leas esta carta ya no voy a estar aquí, me habré ido de la ciudad. Te dejo la llave del departamento con la vecina, puedes pasar a recoger tus cosas. Las he dejado varias cajas –todas etiquetas- espero no te molestes por mi atrevimiento, pasa que me quiero ir a encontrar una vida donde tú ya no seas parte de ella.
Como la vecina es muy entrometida junto con esta carta te envío la lista de las cajas con la descripción de su contenido, para que llegado el momento en que las recojas revises se encuentren completas, no vaya a ser que la vecina tome algo.
Se que cuando te marchaste hiciste lo posible por llevar contigo todas tus pertenencias pero con las prisas temo que no te diste cuenta que olvidaste algunas que seguramente no creíste indispensables. No te quito mas el tiempo, se que entre nosotros dos esto ya esta mas que hablado.
Se despide de ti,
Él.
Lista de pertenencias olvidadas.
Caja 1. Las ilusiones.
En esta caja podrás encontraras miles de ilusiones compartidas, sueños no realizados y una que otra esperanza de volver. Ojala y te sirvan en tu nuevo amor.
Caja 2. El odio, la ira, la frustración.
Ten cuidado al abrirla, en ella te dejo todo ese odio que un día creí tenerte por abandonarme, la ira que me daba imaginarte feliz en otros brazos, las frustraciones por no saber recuperarte. Es un remolino de emociones encontradas que pueden lastimarte. Preferiría la tiraras a la basura, yo no hice pues es parte de lo que un día sentí por ti. Son tuyos, te pertenecen.
Caja 3. Los vicios, las adicciones, la primera afrenta con la realidad.
Ábrela solo en el caso de que un día te sientas triste, sin amor, derrotada, dispuesta a perder todo, cuando estés segura que es el momento de hundirte en el pantano de la soledad, llegar a terreno firme y resurgir.
Caja 4.Vacía, para llenarse por lo que se desee.
Ya habrás leído el contenido de las cajas anteriores y supongo te sorprendiste que solo te he dejado mis odios, resentimientos, desilusiones más un sinfín de emociones y vibras negativas. Es lo único al partir dejaste. El amor, los buenos ratos, las ganas de vivir, todo lo bueno te lo llevaste aquel desafortunado día. Tuve que luchar incluso contra mi mismo para poder recuperar un poco, y todo fue nuevo, de esto que hoy siento y me llevo conmigo nada te pertenece. Hoy puedo decirte que me voy limpio de ti. Te dejo una caja vacía para que en caso de que no quieras llevarte todo, escojas lo que te pueda servir, lo que creas pueda ayudarte en tu nueva vida. Yo me voy, ya te lo dije antes, pero me gusta repetírtelo, me voy. Lo quiero gritar: Me voy!
Ojala la oficina de correos no tenga problemas para entregarte la carta, pues en mi afán por olvidar tus besos, tus carisias, tus mentiras y tu falso amor, olvide tu nombre.
Olvide que un día gris en mi vida te inventé para mitigar mi soledad…
Cuando leas esta carta ya no voy a estar aquí, me habré ido de la ciudad. Te dejo la llave del departamento con la vecina, puedes pasar a recoger tus cosas. Las he dejado varias cajas –todas etiquetas- espero no te molestes por mi atrevimiento, pasa que me quiero ir a encontrar una vida donde tú ya no seas parte de ella.
Como la vecina es muy entrometida junto con esta carta te envío la lista de las cajas con la descripción de su contenido, para que llegado el momento en que las recojas revises se encuentren completas, no vaya a ser que la vecina tome algo.
Se que cuando te marchaste hiciste lo posible por llevar contigo todas tus pertenencias pero con las prisas temo que no te diste cuenta que olvidaste algunas que seguramente no creíste indispensables. No te quito mas el tiempo, se que entre nosotros dos esto ya esta mas que hablado.
Se despide de ti,
Él.
Lista de pertenencias olvidadas.
Caja 1. Las ilusiones.
En esta caja podrás encontraras miles de ilusiones compartidas, sueños no realizados y una que otra esperanza de volver. Ojala y te sirvan en tu nuevo amor.
Caja 2. El odio, la ira, la frustración.
Ten cuidado al abrirla, en ella te dejo todo ese odio que un día creí tenerte por abandonarme, la ira que me daba imaginarte feliz en otros brazos, las frustraciones por no saber recuperarte. Es un remolino de emociones encontradas que pueden lastimarte. Preferiría la tiraras a la basura, yo no hice pues es parte de lo que un día sentí por ti. Son tuyos, te pertenecen.
Caja 3. Los vicios, las adicciones, la primera afrenta con la realidad.
Ábrela solo en el caso de que un día te sientas triste, sin amor, derrotada, dispuesta a perder todo, cuando estés segura que es el momento de hundirte en el pantano de la soledad, llegar a terreno firme y resurgir.
Caja 4.Vacía, para llenarse por lo que se desee.
Ya habrás leído el contenido de las cajas anteriores y supongo te sorprendiste que solo te he dejado mis odios, resentimientos, desilusiones más un sinfín de emociones y vibras negativas. Es lo único al partir dejaste. El amor, los buenos ratos, las ganas de vivir, todo lo bueno te lo llevaste aquel desafortunado día. Tuve que luchar incluso contra mi mismo para poder recuperar un poco, y todo fue nuevo, de esto que hoy siento y me llevo conmigo nada te pertenece. Hoy puedo decirte que me voy limpio de ti. Te dejo una caja vacía para que en caso de que no quieras llevarte todo, escojas lo que te pueda servir, lo que creas pueda ayudarte en tu nueva vida. Yo me voy, ya te lo dije antes, pero me gusta repetírtelo, me voy. Lo quiero gritar: Me voy!
Ojala la oficina de correos no tenga problemas para entregarte la carta, pues en mi afán por olvidar tus besos, tus carisias, tus mentiras y tu falso amor, olvide tu nombre.
Olvide que un día gris en mi vida te inventé para mitigar mi soledad…
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